En Bolivia, la AVCCI (Asociación de Voluntarios Contra el Cáncer Infantil) ha puesto en marcha una iniciativa para ayudar a los más pequeños. Los peluches Monstruos se han diseñado para ayudar a los niños a luchar contra el miedo al cáncer.

Peluches Monstruos, tiernos amigos que ayudan a perder el miedo al cáncer

Los monstruos no tienen por qué dar miedo. De hecho, los peluches Monstruos se han diseñado específicamente para combatirlo. Estos juguetes, fabricados por familias de pocos recursos en Bolivia, se convierten en una forma de ganarse la vida mientras ayudan a los niños con cáncer a combatir el miedo a la enfermedad.

Estos adorables peluches forman parte de la iniciativa «Venciendo monstruos», que puso en marcha la Asociación de Voluntarios Contra el Cáncer Infantil (AVCCI) de Bolivia. Además de los juguetes, en el programa se incluyen ayudas económicas para alimentación y otros recursos ofrecidos a las familias de niños que están sufriendo cáncer.

Los peluches Monstruos son de todo tipo: están hechos con fieltro pero los hay de todos los colores. Además, tienen caras que expresan sentimientos (como miedo o rabia), lo que ayuda a los más pequeños a explorar y expresar sus propias emociones con el juego.

En definitiva: estos peluches se convierten en herramientas emocionales y en compañeros de terapia en ese largo y duro combate contra el cáncer.

Al mismo tiempo, las familias que fabrican los peluches tienen una vía para ganar un salario con esta tarea, y la AVCCI de Bolivia obtiene recursos para seguir ayudando a las familias más desfavorecidas.

Desde la asociación explican que muchos familiares con niños con cáncer no se pueden permitir los desplazamientos desde zonas alejadas a las grandes ciudades para el tratamiento de los peques. Además, ante la ansiedad y la falta de recursos, no son pocos los padres que dejan de comer y se vuelven adictos a algunas drogas.

Una sencilla iniciativa como la de los peluches Monstruos puede ayudar a combatir muchos de estos problemas de una vez. ¡Es una idea excelente!

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